La importancia de los jóvenes en el desarrollo de la Provincia de Málaga nos impulsó en el año 2006 a lanzar un estudio sobre el empleo juvenil. Se enmarca dentro del Pacto sobre el Crecimiento Equilibrado y Empleo, uno de los seis pactos que articulan el Plan de Actuaciones Estratégicas de la Provincia de Málaga.
En la muestra representativa de encuestados se hizo una división en varios subgrupos integrados por jóvenes ocupados, desempleados, estudiantes y aquellos dedicados a las labores del hogar. Se tomaron como variables el género, la edad –entre 18 y 24 años; y entre 25 y 30 años- y el lugar de residencia.
La radiografía del empleo juvenil se ejecutó a través de 1.604 encuestas e ilustró el panorama laboral que atravesaba este colectivo. Entre los datos extraídos destacó una tasa de paro del 11%, un 62% de jóvenes ocupados y un 26% de inactivos. Comparando con las cifras de paro general, cabe destacar un porcentaje más elevado entre los jóvenes.
La distinción entre géneros permitió concluir que existía una brecha entre hombres y mujeres, ya que los jóvenes varones tenían una tasa de empleo más elevada que las mujeres. En 2005 la tasa de empleo juvenil masculina era del 70,8% y la femenina del 54%, 16 puntos porcentuales de diferencia.
En cuanto a la edad de los encuestados, la investigación expone que el desempleo es especialmente acusado entre la población joven de 18 a 24 años, diez puntos porcentuales más que el grupo de 25 a 30 años.
Contar con formación universitaria incrementa las posibilidades de encontrar trabajo frente a aquellos que solo disponen de estudios primarios. También aumentan los niveles de exigencia en la búsqueda de empleo de acuerdo a una preparación más amplia. El 11% de los jóvenes encuestados afirmaron que habían rechazado un puesto de trabajo recientemente debido a condicionantes como los bajos salarios o la irregularidad de las ofertas.
Para concluir, los grupos de trabajo realizados denostaron que existía una notable falta de formación entre los jóvenes de la provincia, carecían de suficiente información sobre la realidad laboral y existía una falta de motivación. También cabe resaltar el retroceso experimentado por la mujer, aumentado su dependencia y disminuyendo su nivel de cualificación.
Si quieren conocer todos los detalles del Informe de Empleo Juvenil 2006